La Navidad tiene dos aspectos que se complemetan perfectamente. En primer lugar es una fiesta del interior pues Jesús nace en cada uno de nosotros, en nuestro más profundo ser; Él nos recuerda que nuestra esencia es buena, que en el interior de todo ser humano hay algo que no puede cambiar y es su sello de bondad, amor, sabiduría. Pero todo esto no puede quedar ahí, tiene que proyectarse, tiene que manifestarse en gestos concretos de solidaridad con quienes Jesús se identificó, con los pobres y desposeidos en donde quiera que estos esten.
Me gusta mucho este villancico, lo siento más cercano. Lo comparto con todos los que gustan de las cosas simples.
Les deseo a todos una santa y feliz NAVIDAD. Que Jesús nasca en cada uno de ustedes, en cada una de sus familias y espacios en los que se desenvuelven.
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